Jacqueline Golbert

De momento estábamos hablando de los mambos
del estar en pareja
y los dos acordábamos en casi todo
que eso, que sí, que es re difícil coordinar con un otro
si no lo encontrás en tu mismo viaje.
Sumado a coincidir, a atraerse, a las ganas
a los planteos, a que los ex ya no te perturben la cabecita.
“Cabecita”, dijo.

Los mambos y el amor, y el mismo viaje
y los ex no perturbando y gustarse
y tener ganas, y espacio
y todo eso al mismo tiempo.

Es re jodido, le dije, mientras miraba como se enfriaba el café
porque no quería hablar más
y él siguió hablando de lo mismo
y enumerando dificultades para el encuentro
y mi paranoia lo tomó personal.

Más no tener la agenda ocupada, más querer barra poder
más que no sé si estoy preparado para algo tan grande como el amor
más no sé si creo en el amor
más no sé si creo en la monogamia
más no sé si creo.

No lo miré más a la cara
me preguntó qué me pasaba
le dije nada
y me propuso ser su novia.

Jacqueline Golbert (Capital Federal)

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